Cuando comenzé en, "colegio grande", ingresaba al grado primero el cambio fue total por varias razones, la primera el solo hecho de ser colegio, ya no era solo encontrarse con los niños grandes de quinto de primaria sino encontrarme con niñas grandes, es decir, undecimo, mejor dicho en época once, segundo tener que viajar en bus, experiencia completamente nueva para una niña de 7 años, y claro dejar los amiguitos que habia conocido. El nombre del colegio es Nuestra Señora de Itagüí, En ese colegio solo curse el grado primero, porque tenia una tía en otro colegio, mis padres decidieron cambiarme y entre a "La Inmaculada" también en Itagüí. Allí terminé mi primaria y también mi bachillerato.
De ese colegio guardo demasiado recuerdo, comenzando por la directora del colegio, una Hermana franciscana con todo el temple de las mujeres antioqueñas, que nos bajaba el ruedo del uniforme cuando lo veía encima de la rodilla y nos enviaba literalmente como una sombrilla para la casa, también utilizabamos el famoso "copete Alf" o "la araña", el cual lograbamos obtener despues de media hora frente al espejo y un tarro de laca, para que ella en cuestion de 2 minutos y jabon "Rey" en el baño nos dejara "carilavadas" y aburridas. Los lunes de acto civico y la aburrición de estar de pie por mas de una hora escuchando el discurso del profe de español, de Teresita la otra profe de español y claro de la rectora, de la que antes les hablé, a la que juré ojala nunca encontrarme y oh sorpresa! la veo todos los días aquí en la U. la Hermana Nora Alba Berrio Bolívar.